Editorial
En el periodo de finalización del proceso de edición de esta nueva versión de El Astrolabio, el mundo se ha visto sorprendido con el lanzamiento de la más reciente y potente herramienta de Inteligencia Artificial, ChatGPT, que con absoluta seguridad revolucionará la manera en que concebimos, no solamente la educación en general, sino escenarios más específicos como el de la investigación.
¿Tiene sentido que sigamos invirtiendo esfuerzos en la producción de conocimiento, en la medida en que más temprano que tarde existirán robots capaces de producirlo con un margen de error que se irá contrayendo con el tiempo? La respuesta categórica a la que hemos llegado en el Gimnasio Campestre es que sí lo tiene, siempre y cuando seamos capaces de dotar a nuestros profesores y estudiantes de un marco ético que les permita aprovechar al máximo todas las potencialidades ofrecidas por las nuevas herramientas tecnológicas, y reconocer con claridad hasta dónde podemos llegar con su uso. Solamente con un uso mediado por un discernimiento bien estructurado y con un uso adecuado de nuestra capacidad para aprender podremos asegurar que la aparición de estas nuevas herramientas representan una fuente de verdadero mejoramiento para nuestra sociedad.
La presente edición de nuestra revista cuenta, como de costumbre, con trabajos desarrollados por estudiantes y profesores de nuestro Colegio, quienes progresivamente han abierto campo al desarrollo de proyectos en la línea de la investigación-creación. Cuenta además, en un hito que representa un factor de orgullo para el Gimnasio Campestre, con una serie de trabajos desarrollados en la línea de investigación en pedagogía, abriendo así camino a un trabajo trascendente que aspiramos desarrollar a través del recientemente creado Centro de Estudios en Pedagogía, cuya vocación es generar un motor institucional capaz de transferir a otros contextos el aprendizaje acumulado en 77 años de trayectoria pedagógica, e incorporar los mejores insumos para continuar fortaleciendo nuestras prácticas para el beneficio de las siguientes generaciones de gimnasianos.
En el Gimnasio Campestre asumimos la capacidad para aprender como nuestro principal talento, y la innovación como nuestra principal tradición. El trabajo adelantado por los autores de los artículos aquí publicados dan cuenta de lo primero, y la exploración de nuevos y mejores formatos para extender los alcances de nuestro trabajo investigativo ratifican lo segundo.
ALEJANDRO NOGUERA CEPEDA
Rector
