Categoría: Investigación Científica y Tecnológica
Artículo original
Los días oscuros de Montería y Nueva Inglaterra
Freddy Moreno1, Martín La Rotta2, José Daniel Reyes2 y Carlos Nicolás Cano2.
1. Centro de Estudios Astrofísicos, Gimnasio Campestre.
2. Estudiantes del Gimnasio Campestre
Correspondencia para los autores: fmoreno@campestre.edu.co
Recibido: 21 de marzo de 2023
Aceptado: 5 de mayo de 2023

RESUMEN
ABSTRACT
Los días de oscuridad son fenómenos naturales en los que se describe una pérdida de brillo en el disco solar. Han sido reportados desde la antigüedad y su origen puede ser muy diverso, desde grandes incendios forestales, pasando por erupciones volcánicas, hasta los producidos por fenómenos astronómicos. El día de oscuridad más famoso es el ocurrido el 19 de mayo de 1780 en Nueva Inglaterra. Una revisión en libros de historia de Colombia permitió identificar un fenómeno similar el 19 de marzo de 1780. Debido a la cercanía de las fechas y a su semejanza, se presenta una hipótesis para explicarlos, la cual propone la entrada de un meteoroide en la atmósfera terrestre en zona cercana a Montería y la formación de una nube oscura producto de desintegración del cuerpo, la cual produjo los días de oscuridad en los dos sitios.
Palabras clave: Días de oscuridad, Nueva Inglaterra 1780, Montería, Colombia, meteoroide.
The dark days are natural phenomena in which a loss of brightness in the solar disk is described. They have been reported since ancient times, their origin can be very diverse, from large forest fires, through volcanic eruptions, to those produced by astronomical phenomena. The most recognized dark day is the one that occurred on May 19, 1780, in New England. A review of Colombian history books allowed the identification of a similar phenomenon on March 19, 1780. Due to the closeness of the dates and their similarity, a new hypothesis is presented to explain them, which proposes the entry of a meteoroid into the atmosphere in the area near Monteria and the formation of a dark cloud product of disintegration of the body, which produced the dark days in the two sites.
Key words: Dark days, New England 1780, Monteria, Colombia, meteoroid.
Los días de oscuridad son fenómenos naturales en los que se describe una pérdida de brillo parcial o total en el disco solar.

INTRODUCCIÓN
Los días de oscuridad son fenómenos naturales en los que se describe una pérdida de brillo parcial o total en el disco solar. Han sido reportados desde la antigüedad, su origen es muy diverso así: de origen astronómico como eclipses totales de Sol y ofuscaciones, observaciones del Sol enrojecidos, oscuridad por nubes de polvo producidas por erupciones volcánicas; como ocurrió con los volcanes Tambora (1815) y Krakatoa (1883) figura 1. También se han observado atmósferas amarillentas debido a grandes incendios forestales y en otras ocasiones disminución en el brillo solar producido por polvo de los desiertos y días oscuros producidos por condiciones meteorológicas especiales como las sucedidas en Buenos Aires el 8 de agosto de 2011(Nteve, 2011).
Las descripciones sobre perdida del brillo del Sol parcial o totalmente de origen astronómico se pueden clasificar en cuatro categorías: 1.) eclipses solares mal reportados, cuya duración ha sido alterada por la tradición, son los más abundantes. 2.) La observación de manchas solares visibles a simple vista, en especial las que aparecen en reportes muy antiguos, sin embargo, este tipo de fenómeno no altera la intensidad de la luz recibida en nuestro planeta. 3.) Ofuscaciones o disminución de la luz solar resultado de un oscurecimiento general en la que también participan la luz de las demás estrellas, (Roche, 1866), un ejemplo de lo anterior es el oscurecimiento del Sol debido a que la Tierra pasa dentro de la cola de un cometa como lo que ocurrió con el paso de la Tierra por la cola del cometa Tebbutt en 1861 y los días oscuros que ocurrieron después de la batalla de Mühlberg en abril de 1547 (Zurcher y Margolle,1870). 4.) Los días oscuros o “dark days” en los cuales se reporta una pérdida total de luz por varias horas, como lo sucedido en Nueva Inglaterra en 1780, cuya causa a la fecha no está bien establecida y que hace parte de este estudio.
Figura 1. Litografía de Parker & Coward sobre la erupción del volcán Krakatoa en 1883.
LOS DÍAS OSCUROS DE MÜHLBERG
Mühlberg es una población alemana, famosa porque en sus predios ocurrió la batalla entre el emperador Carlos V y la Liga de la Esmalcalda, es decir la unión de príncipes y ciudades protestantes del Sacro Imperio Romano Germánico, que existió entre 1531 y 1547, para defender sus privilegios y luchar contra Carlos V, defensor del catolicismo (figura 2). La batalla ocurrió el 24 de abril de 1547, sin embargo, Mühlberg también es recordada por la oscuridad observada durante tres o cuatro días, estudiada por Kepler a partir de los reportes de Gemma Frisius y otros astrónomos de la época. El reporte cuenta lo siguiente:” el ejemplo de la niebla prodigiosa del año 1547, de la cual Gemma, padre e hijo, relatan que el sol estuvo cubierto de sangre durante tres días; de modo que, incluso las estrellas que se veían principalmente en el sur” (Roche,1866).
Scaliger, en libro “La enmienda de los tiempos” la llama ofuscación, por ser un fenómeno en la que se vio una disminución de luminosidad del Sol y la Luna con la observación de estrellas o planetas a plena luz del día (Roche, 1866). Kepler quiso buscar la causa, primero en la interposición de una materia cometaria, luego en una nube negra a la que habrían contribuido a formar las emanaciones de hollín que salían del cuerpo del Sol. Chladni y Schnürrer atribuyeron la pérdida de luz al paso de masas meteóricas por delante del disco del Sol, fenómeno análogo al de los años 1091 y 1206, que duraron menos, el primero tres, el segundo seis horas” (Roche, 1866). Scaliger, citado por Kepler, dijo que de las estrellas se veían al mediodía. Este fenómeno se vio no solo en Bélgica, sino que se esparció por Francia, Alemania y Gran Bretaña (Roche, 1866).

Figura 2. Carlos V a caballo en Mühlberg. Pintura de Tiziano.

Otra pérdida del brillo solar ocurrió el 29 de junio de 1861, cuando el núcleo del Cometa Tebbutt, durante su perihelio, hizo que la cola del cometa se interpusiera entre el Sol y la Tierra (Bortle, 1998). Durante un lapso, la Tierra estuvo realmente dentro de la cola del cometa y sus habitantes tuvieron una visión breve pero vertiginosa de corrientes de material cometario que convergían hacia el núcleo distante. Durante el día, la luz del Sol también se atenuó cuando la Tierra atravesó el plasma y el polvo del cometa, el reporte dice lo siguiente:
El paso de la cola del cometa Tebbutt (figura 3) hizo que el brillo solar fuera disminuido en gran manera, …se notó una extraña apariencia en el cielo. E. J. Lowe, en Beaston, dijo: El cielo tenía un aspecto amarillo, auroral, como un resplandor, y el Sol, aunque brillaba, daba una luz débil… en nuestra iglesia parroquial, el vicario hizo encender las velas del púlpito a las siete en punto, una prueba de que se sentía una sensación de oscuridad incluso con el Sol brillando” (Chatfield, 2010).
Figura 3. El cometa Tebbutt observado en 1861 dibujo de E. Weiis.

EL DÍA OSCURO DE NUEVA INGLATERRA
En la historia de los Estados Unidos de América, hay una anécdota que sobresale por su singularidad, conocida como “The dark day of 1780” (figura 4). Devens (1878) lo considera como uno de los hechos más notables ocurridos durante el primer siglo de la nación norteamericana. En ella se relata que el viernes 19 de mayo de 1780, se observó un oscurecimiento total e inusual, desde las 10 de la mañana, sobre los estados de Nueva Inglaterra y algunas partes de Canadá. La oscuridad era tan completa que se requirieron velas para iluminar las casas a partir del mediodía (Harris, 2020; Campanella, 2007).
Campanella (2007) utilizando relatos extraídos de diarios, revistas, periódicos, folletos y otras fuentes del siglo XVIII y autores contemporáneos, reconstruyó los eventos de este hito y exploró las diferentes hipótesis que se han propuesto, desde la especulación teológica hasta la investigación científica amateur, en las que los habitantes de Nueva Inglaterra intentaron explicar y racionalizar la oscuridad repentina.
Figura 4. Representación del “día oscuro de 1780”
Algunos de los fenómenos observados ese día fueron:
– La oscuridad se observó en los estados pertenecientes a Nueva Inglaterra (figura 5) y no fue total en todos los sitios como lo explica Tenney:
El resultado de mis averiguaciones, durante ese viaje y después de mi regreso, fue que la oscuridad era más densa en el condado de Essex, la parte baja del estado de New Hampshire y la antigua provincia de Maine. En Rhode Island y Connecticut no fue tan grande, y menos en Nueva York. En New Jersey se observó el segundo estrato de nubes, pero no de gran espesor; ni fue la oscuridad muy poco común. En las partes bajas de Pensilvania, si no me falla la memoria, no se notó ninguna apariencia extraordinaria. (Tenney,1792).
-Durante los días anteriores a la oscuridad fueron reportadas observaciones del Sol y de la Luna de color rojizo, como los escribió el juez Samuel Phillips Savage:” El Sol sale y se pone muy rojo” (Campanella,2007). Sobre nuestro satélite escribió: “Otros habían notado que al anochecer la Luna menguante también se sonrojó con un extraño tono rosado” (Campanella, 2007).
Viator (1785) un testigo del fenómeno comentó:” Durante varios días, el hemisferio había estado muy oscurecido por el humo y el vapor, de modo que el Sol y la Luna aparecían inusualmente rojos”. El mismo autor dice más adelante:
El jueves por la tarde y por la noche, una espesa nube cubrió el sur y el suroeste, el viento era débil. El viernes por la mañana temprano el Sol aparecía rojo, como lo había hecho varios días antes, el viento era del suroeste, una brisa ligera y las nubes del suroeste llegaron entre las ocho y las nueve, el Sol estaba bastante cerrado, y comenzó a llover… (Viator, 1785).
-El amanecer del viernes 19 de mayo en Nueva Inglaterra no fue normal, el cielo tenía un tono herboso claro, casi el color de sidra pálido. “El cielo bilioso pronto fue acompañado por una penumbra casi parecida a la de un eclipse de Sol ” (Campanella, 2007). Cerca de las 10 de la mañana, en el territorio de Nueva Inglaterra, es decir la mayoría del condado de Essex, Massachusetts, la parte inferior del estado de New Hampshire y en partes de la provincia de Maine, el Sol había desaparecido casi por completo y el cielo se oscureció rápidamente. Los pájaros cantores que vitorearon el día sólo unas horas antes, ahora se quedaron en silencio. “Las aves se retiraban a sus refugios o se reunían en grupos”, mientras los gallos cantaban y los grillos sacudían sus violines (Campanella, 2007).
Viator (1785) nos relata cómo trascurrieron las horas siguientes en oscuridad:
Alrededor de las once de la mañana la oscuridad era tal que exigió nuestra atención y nos llevó a hacer observaciones. A las once y media en una habitación con tres ventanas, de 24 paneles cada una, abierta hacia el sureste y el sur, la letra grande no podía ser leída por personas con buenos ojos. A eso de las doce, estando aún abiertas las ventanas, una vela proyectaba una sombra tan bien definida en la pared, que los perfiles se tomaban con tanta facilidad como se hubiera podido hacer en la noche.

Figura 5. Mapa de los estados de Nueva Inglaterra donde se observó la oscuridad de 1780.

Los habitantes de la región habían quedado desconcertados ante el extraño fenómeno, Viator (1785) comenta lo acontecido:
“Cenamos alrededor de las dos, todas las ventanas abiertas y dos velas encendidas en la mesa. En el momento de mayor oscuridad, algunas de las aves se fueron a su gallinero; Los gallos cantaban en respuesta unos a otros como suelen hacer en la noche; los pájaros nocturnos silbaban como lo hacen sólo en la oscuridad; las ranas se asomaron. En resumen, apareció la medianoche en el mediodía”.
-A lo largo del día ocurrieron varios chubascos que llevaron a descubrir algo anormal:
”El amigo de Well-Wisher de New Hampshire también informó haber hablado con un hombre que había estado cabalgando en el bosque sobre Penacook, New Hampshire, donde apenas podía respirar al cruzar terreno bajo, debido al espeso humo. Otro habló de una escoria de color oscuro como el hollín flotando en la superficie de un río cercano. Mientras tanto, varios vecinos recogieron agua de lluvia varias veces (porque hubo lloviznas todo el día) y estaba tan negra que no la usaron para lavar” (Campanella, 2007).
Un observador, en la parte este de Massachusetts, afirmó, a este respecto:
“La extraña apariencia y el olor del agua de lluvia que la gente venía guardado en tinas fue objeto de comentarios universales y sorprendentes. Al examinar el agua, se encontró una escoria ligera sobre ella, que, al ser frotada entre el pulgar y el índice, parecía asemejarse a las cenizas negras de las hojas quemadas; el agua también desprendía el mismo fuerte olor a hollín que caracterizaba el aire” (Devens, 1878).
-La oscuridad hizo que la gran mayoría de la población de Nueva Inglaterra se volviera hacia Dios: durante todo el día y la noche las personas buscaron sus lugares de culto y es que ante lo raro del fenómeno la Biblia tenía mucho que contar como en los relatos del libro del Éxodo 10:21: “Extiende tu mano hacia el cielo, para que haya tinieblas sobre la tierra de Egipto, tinieblas que se sientan. Y Moisés extendió su mano hacia el cielo; y hubo una densa oscuridad en toda la tierra de Egipto por tres días”.
En otras partes de la Biblia en donde se habla de esto son: en Ezequiel 32:7, Dios amenaza con “cubrir el Sol con una nube”. En Joel 2:2 “día de tinieblas y oscuridad”. En Mateo 24:29, Marcos 13:24 y Hechos 2:20 se advierte sobre los soles oscurecidos y lunas de sangre, al igual que el Libro de las Revelaciones 6:12.
Figura 6. Abraham Davenport. Autor Ralph Earl 1788, Yale University Art Gallery.
Muchas fueron las causas que inicialmente se dieron sobre el origen de esta oscuridad, desde lo religioso hasta lo científico. Respecto a lo primero es muy famoso lo que sucedió en la legislatura, quienes al ver la situación tan anormal propusieron al legislador Abraham Davenport (figuras 6 y 7), nieto de uno de los fundadores de New Haven y la Universidad de Yale, cancelar la reunión:
Se cuenta que la legislatura de Connecticut estaba en sesión en este tiempo, y que, siendo tan grande la oscuridad, los miembros se horrorizaron y pensaron que el día del juicio había llegado; en consecuencia, se hizo una moción para aplazar la sesión. Ante esto, el Sr. Davenport se levantó y dijo: o es el día del juicio, o no lo es. Si no es así, no hay necesidad de aplazar. Si es así, deseo que me encuentren cumpliendo con mi deber. Propongo que se traigan velas y que procedamos al negocio (Devens,1878).
A finales del siglo XVIII Nueva Inglaterra se debatía entre el puritanismo y el desarrollo científico, algunos pensadores desarrollaban la idea de la compatibilidad de la investigación científica y la teología cristiana. El año de 1780 fue un año crítico para los patriotas norteamericanos, pues enfrentaban a los ingleses para logar su independencia. En esta época no existían las revistas científicas y los filósofos naturales empezaron a proponer y a refutar hipótesis sobre el origen de la oscuridad del 19 de mayo, enviando cartas a los periódicos de la región (Campanella, 2007).

Figura 7. Abraham Davenport de pie ante el gobernador Jonathan Trumbull en el famoso “Día Oscuro de 1780”. Obra de Delos Palmer.

Viator, uno de ellos, en una carta enviada el 25 de mayo al periódico “Independent Cronicle” propone que la oscuridad se debió principalmente a que materia generada por el incendio de bosques cercanos interactuó con la lluvia y los vientos:
El agua despedía el mismo fuerte olor a hollín que habíamos observado en el aire y me confirmó en mi opinión, que el olor fue ocasionado por el humo, o partículas muy pequeñas de hojas quemadas, que habían oscurecido el hemisferio durante varios días, y ahora eran arrastradas por la lluvia (Campanella, 2007).
El mismo autor en otro comunicado expresó:
“La gran masa de humo de los bosques que llevaba muchos días ardiendo, mezclándose con las exhalaciones comunes de la tierra y el agua, y condensada por la acción de los vientos de puntos opuestos, pueden ser quizás causas suficientes para producir la sorprendente oscuridad” (Viator,1785).
Otra hipótesis que se dio a la causa de la oscuridad era que la Tierra había pasado a través de la cola de un cometa, sin embargo, fue rechazada:
“algunos han supuesto que la Tierra pasaba por la cola de un cometa; a esto es suficiente respuesta que las estrellas son visibles a través de las colas de los cometas, por lo tanto, es imposible que esta causa oscurezca el brillo del Sol” (Campanella,2007).
Otro corresponsal propuso que la oscuridad fue producida por la aproximación del núcleo de un cometa el cual debido a su corto periodo se acercamiento no generó marea alta ni maremoto.
Un lector del periódico “Crónica”, llamado Nubes, también sostuvo que la causa de la oscuridad eran las nubes y no el humo. Nubes afirmó que era improbable que la atmósfera pudiera haber soportado tan inmensas ‘cantidades de hollín a alturas suficientes para obstruir las cimas de las montañas más altas. Si bien admitió que “un fuerte olor a azufre era muy perceptible para mis propios sentidos”, lo atribuyó al “humo de las chimeneas” más que a incendios forestales lejanos (Campanella, 2007).
En la actualidad la hipótesis más probable para algunos científicos es que la oscuridad fue una combinación del humo de incendios forestales provenientes del Parque Provincial Algonquino en Ontario, donde algunos árboles muestran evidencias en los anillos de un incendio en 1780. Otros autores creen que los incendios originados en Missouri en el mismo año contribuyeron a la oscuridad del 19 de mayo (McMurry et al. 2007), la distancia entre estas zonas y Nueva Inglaterra es cerca de 700 kilómetros en el primer caso y cerca de 2000 kilómetros para el segundo. No parece lógico que incendios originados a tales distancias logren opacar la luz del Sol en la costa nororiental de los Estados Unidos.

LOS DÍAS OSCUROS DE MONTERÍA
Una revisión bibliográfica de libros de historia de nuestro país permitió encontrar otra situación con características similares a la anterior, en Montería también en 1780 (figura 8). La situación es descrita en el libro sobre la historia de esta ciudad, de Jaime Exbrayat (1971). El cronista describe lo siguiente:
El 19 de marzo de 1780 fue día de inquietud para los habitantes de Montería. A las 10 de la mañana comenzó a oscurecer como si fuera de noche. Las aves de corral y demás volátiles buscaban presurosas sus dormitorios y en cada casa se encendían los pábilos, pues era tan grande la oscuridad, que difícilmente se podía transitar por las calles del poblado…Así transcurrieron las horas del día hasta llegar la noche, noche igual al día que la precedió. Al amanecer del 20, con gran alegría de todos, la luz de la mañana se presentó más alegre que nunca, pero después de pocas horas se presentó el fenómeno de un repentino oscurecimiento. El silencio se hizo más solemne y aterrorizados, presos del pánico, los monterianos comenzaron a creer que realmente se acercaba el fin del mundo…Cuando menos se esperaba apareció la luz del claro Sol devolviendo a todos la confianza perdida y la dicha de vivir (Exbrayat, 1971).
Ante la similitud de los fenómenos de Montería y Nueva Inglaterra y la cercanía de las fechas en que ocurrieron, surgen preguntas como: ¿Están los dos hechos relacionados? ¿Qué tipo de fenómeno natural produjo esta oscuridad? A continuación, trataremos de evaluar varias hipótesis para entender lo sucedido en 1780.
Figura 8. Ermita antigua de San Jerónimo, Montería. Imagen tomada de http://www.la piragua.co.
Algunas de las causas no astronómicas que se han propuesto para explicar el fenómeno de la oscuridad en pleno día son: incendios muy grandes de bosques y una posible erupción volcánica
ANÁLISIS
Algunas de las causas no astronómicas que se han propuesto para explicar el fenómeno de la oscuridad en pleno día son: incendios muy grandes de bosques y una posible erupción volcánica, a continuación, haremos un análisis para tratar de establecer las causas más probables de lo que ocurrió en Nueva Inglaterra y Montería.
En el noreste de los Estados Unidos no existen reportes de volcanes activos, por eso es que la causa más probable para los científicos sigue siendo un incendio causado por fuego inducido por una extrema sequía y relámpagos o fuego creado buscando una siembra posterior, posiblemente situado en lo que hoy es el Parque Algonquino. Esta hipótesis se sostiene por la presencia de huellas fuego en los anillos de los árboles de la zona (figura 9 y 10) (McMurry et al.,2007). El año de 1780 es reconocido por la dureza del invierno sentido en Norteamérica durante los primeros meses del año, según se entiende de lo expresado en el diario del coronel Israel Angell (1899), quien fue comandante del Segundo Regimiento de Rhode Island, lo cual hace dudar sobre la hipótesis de los incendios forestales, la que prevalece en la actualidad. Campanella (2007) también llama la atención sobre el clima durante de los primeros meses del año: “había sido un invierno duro y largo, uno de los más fríos que se recuerdan y aunque el aliento primaveral estaba en el aire, también había señales preocupantes. Desde hacía varios días, el clima había sido inusualmente cálido”.

Figura 9. Condiciones que se observaron durante el día oscuro del 19 de mayo de 1780 y la localización del incendio en el Parque Nacional Algonquino.

Respecto a Montería se hizo una búsqueda intensiva de otra causa del oscurecimiento, como lo es la posible erupción de un volcán en Colombia, Ecuador o en Centro América, donde existen volcanes que presentan gran actividad (Sigurdsson, et al., 1999). La pesquisa no identificó actividad volcánica importante. Según el Global Volcanism Program (2013) durante 1780, solo 19 volcanes entraron en erupción en el mundo, de ellos dos lo hicieron en América; el Villarrica en Chile, bastante lejano de Montería y el Colima en México, erupción que ocurrió el 26 de noviembre de 1780, medio año después del evento que estamos estudiando. Tampoco parece viable que un gran incendio en cercanías de Montería diese origen al oscurecimiento, ya que hubiese quedado presente en la memoria de los pobladores de esta ciudad y en los libros de historia de la zona, lo cual no sucedió.
La cercanía de las fechas del “Dark Day” de Nueva Inglaterra y el de Montería y la similitud de los fenómenos observados nos lleva a proponer una causa única para las dos situaciones. La hipótesis alternativa es ahora la de la entrada de un meteoroide y su posterior desintegración en la atmósfera. En esta situación el material desprendido durante el paso del meteoroide por la atmósfera habría generado una inmensa nube, la cual habría bloqueado la luz del Sol, generando la oscuridad. Una pista que nos puede ayudar a demostrar esta desintegración fue la presencia de hollín en el aire con un fuerte olor a azufre y el cual fue arrastrado al suelo por la lluvia en Nueva Inglaterra:
En la edición del 15 de junio de la Crónica, Nubes afirmó que era improbable que la atmósfera pudiera haber soportado tan inmensas “cantidades de hollín” a alturas suficientes para obstruir las cimas de las montañas más altas. Si bien admitió que “un fuerte olor a azufre era muy perceptible para mis propios sentidos”, lo atribuyó al “humo de las chimeneas” más que a incendios forestales lejanos (Campanella, 2007).
Williams (1785) también reporta un fenómeno similar” y hubo siete pequeños chaparrones antes de las ocho y en algunos lugares hubo chubascos en otros momentos, a lo largo del día. El agua que cayó se encontró que tenía una apariencia poco común, siendo gruesa, oscura y con hollín”.
La caída de hollín es un fenómeno poco nombrado en la literatura sobre caída de meteoroides, sin embargo, hay un reporte muy interesante en el caso del bólido del rio Curuca en Brasil, ocurrido en la mañana del 13 de agosto de 1930. La descripción del paso del meteoroide fue escrita por el misionero franciscano Fidello d’Aviano, dice así:
de pronto hacia las ocho en punto, el Sol se volvió rojo sangre y la oscuridad lo cubrió todo, como si una nube hubiese interceptado los rayos del Sol…pero no había nube alguna…solo la apariencia de un polvo rojizo en la atmósfera dando la impresión de un inmenso fuego que podría volver todos los elementos de la naturaleza en cenizas. Una ceniza fina empezó a caer sobe las plantas de la selva y sobre las aguas del rio…cuando un sonido múltiple como de silbidos que venían de lo alto, que parecían como pitos y proyectiles de artillería…y los silbidos se sentían cada vez más cerca al suelo y eran más amenazantes (Bailey, M, Markham, D., Massai, S. and Scriven J., 1995).
Figura 10. Anillo de los árboles de la zona de Opeongo Lookout, Ontario, que muestran huellas de incendios en 1780 (McMurry,2007).
Otro caso similar al observado en Nueva Inglaterra, en el cual no solo se reportó oscuridad total, sino la presencia de cenizas ocurrió en región de Quebec, en Canadá, durante el 2 y 3 de julio de 1814, el cronista describe la siguiente situación:
El sábado 2 julio y domingo 3, se produjo una oscuridad en Seven Islands Bay y Anticosti, oscuridad excesiva en la noche, a las 9 pm cayó un tipo de polvo y cenizas que siguió en la noche. La Luna no se podía ver (salió a las 8 pm). La atmósfera aparecía roja y ardiente, como si se mirara a través de una ventana de cristal, como si fuera rodeada por fuego. El mar brillaba mucho, inusual en estas latitudes, al día siguiente el mar aprecio cubierto por cenizas y en calma. Un balde de agua parecía tan negro como tinta, las cenizas como si fuera madera quemada. Las cenizas siguieron cayendo el 4 y eran más oscuras y pesadas que las cenizas de tabaco de una pipa… (Shea, 1864).
Como se ha visto, el fenómeno de oscuridad total en un sitio específico de nuestro planeta no es extraño y se ha repetido además varias veces, aún en fechas cercanas como en: Memphis (EE. UU.) el 2 de diciembre de 1904, en La península de Yamal (Siberia) el 19 de septiembre de 1938 y en Wisconsin (EE. UU.) el 19 de marzo de 1886 (Brigth Side, 2022).
El choque del cometa Shoemaker-Levy 9 contra la atmósfera de Júpiter (figura11), en julio de 1994, generó la primera evidencia de un impacto de un cometa con otro planeta. Como consecuencia se observaron grandes zonas oscuras cuando los 21 fragmentos en que se rompió el cometa interactuaban con Júpiter. La colisión también dejó polvo flotando en la parte superior de las nubes de Júpiter. Al observar cómo el polvo se esparcía por el planeta, los científicos pudieron rastrear los vientos de gran altitud en Júpiter por primera vez (NASA,2021). Un estudio espectroscópico de estas zonas oscuras mostro la presencia de azufre diatómico (S2) y al disulfuro de carbono (CS2). Otras moléculas detectadas incluyeron amoníaco (NH3) y sulfuro de hidrógeno (H2S) (Noll et al,1985). Durante las caídas de meteoritos es muy común identificar el olor de azufre debido al calentamiento de moléculas de sulfuro presentes en él (Sears,1975).

Figura 11. Nubes oscuras en Júpiter producidas por el impacto del cometa Shoemaker Levy en julio de 1994.

Con base en el análisis anterior se propone una nueva hipótesis, que pretende vincular los eventos de Montería y Nueva Inglaterra. Se plantea la entrada y posterior desintegración de un meteoroide en alguna zona cercana a Montería, siguiendo la hipótesis que el material desprendido por ablación del meteoroide causó el oscurecimiento. Montería está a una longitud de 75° 43’ W y la zona de Nueva Inglaterra (USA) donde ocurrió el “Dark Day” está entre los 70° y 73° W, por lo que están separadas por cerca de 3800 kilómetros (figura 12). El fenómeno podría haber ocurrido el mismo día, si aceptamos que Exbrayat cometió un error en la transcripción de fecha, es decir cambio marzo por mayo. Sin embargo, en este caso, la nube que generó la entrada del meteoroide debería haber sido muy grande y por lo tanto hubiera cubierto una buena parte de la costa Atlántica de Norteamérica y en muchos sitios del Caribe se hubiera reportado, sin embargo, los indicios son escasos como se analiza a continuación.
Figura 12. Imagen de Google-Earth que muestra la posición de Nueva Inglaterra y Montería y la distancia entre ellas, 3801 kilómetros.
EL DÍA OSCURO DE JAMAICA Y GRENADA
La posibilidad de que la oscuridad en pleno día se hubiese repetido en otras zonas del Caribe, fue revisada por el meteorólogo Maxwell Hall (1917), en una carta enviada al editor de Monthly Weather Review, en la que se describe que una mujer habitante de Montego Bay en Jamaica había sido testigo del día oscuro de 1780:
Estimado señor: ha habido algunas cartas aquí sobre el día oscuro, el 19 de mayo de 1780, registradas en las colecciones históricas de Connecticut; y uno de los escritores remitió el asunto al profesor H. F. Newall, de Cambridge, Inglaterra. La carta al profesor Newall en repetición ha sido publicada, y es en el sentido de que no hay evidencia de que el 19 de mayo de 1780 hubo algún cambio en la luz del Sol. La evidencia citada solo muestra que había condiciones locales de naturaleza inusual en Connecticut, como las que podría producir el humo de los incendios forestales a distancia, con condiciones de viento fácilmente imaginables”. Y así, de hecho, siempre me había supuesto a mí mismo; pero el 12 de febrero de 1915 murió en Montego Bay una mujer a la gran edad de 142 años y el periódico local informó que, ella era una niña en el momento del día oscuro, el 19 de mayo de 1780, pero tenía un claro recuerdo de ello. Luego hice más preguntas, pero no obtuve más información, ni era probable que lo hiciera, más allá del hecho de que la circunstancia se refería a Jamaica (Hall, 1917).
Aunque resulta poco creíble que un ser humano alcance una edad de 142 años, es muy curioso que el sitio donde se produce la noticia, Jamaica, se sitúa muy cerca de la línea que une Nueva Inglaterra y Montería. De hecho, es una de las pocas islas que están cerca a esta línea. En la misma publicación se discute si el origen del fenómeno visto en Jamaica es el mismo que en Nueva Inglaterra, es decir incendios forestales, a lo cual Hall respondió que. “en la isla hay pocos incendios forestales y que permanece siempre verde, por lo tanto, la explicación hay que buscarla en otra parte” (Hall, 1917).
Existe otro reporte de oscuridad, que es muy corto, dice: “en abril de 1780; el cielo oscurecido por una niebla negra en Grenada” (Fort, 1970). La observación se encontró en el libro “The book of the damned”, donde se describen gran cantidad de fenómenos naturales, algunos de los cuales resultan ser muy extraños. En este caso, el fenómeno ocurrió en la isla de Grenada que pertenece a las Antillas Menores (12° 07’ N y 61° 47’ W).
De los cuatro reportes sobre la oscuridad, tres tienen un orden cronológico: Montería 19 de marzo, Grenada en abril y Nueva Inglaterra el 19 de mayo. Esta situación da para proponer una segunda hipótesis, que el asteroide entró el 19 de marzo y su desintegración generó una nube que se originó inicialmente sobre parte de la costa Atlántica colombiana y que posteriormente se desplazó hacia el norte, por efecto de los vientos y llegó el 19 de mayo a Nueva Inglaterra (figura 13). Según las fechas y posiciones hace posible creer que la nube de polvo meteórico se desplazó inicialmente por el Mar Caribe hacia el norte por el Océano Atlántico hasta llegar a las costas de Nueva Inglaterra recorriendo cerca de 3800 kilómetros en 61 días, desplazándose a una velocidad aproximada de 62 kilómetros diarios, dato que parece viable. Esta hipótesis presenta una dificultad, la cual es entender como una nube de polvo meteórico se mantuvo en la atmósfera por más de sesenta días sin desvanecerse.

Figura 13. Imagen de Google-Earth que muestra el posible desplazamiento de la nube de origen meteórico desde Montería pasando por la Isla de Grenada y llegando a Nueva Inglaterra.

EL BÓLIDO DE MOMPOX
La hipótesis de la entrada del bólido en marzo de 1780 está supeditada a encontrar un reporte del paso de un bólido en zona norte de Colombia, en fecha cercana al hecho descrito en Montería, es decir al 19 de marzo de 1780. Los reportes de este tipo son bastantes escasos en suelo colombiano y mucho más difíciles de encontrar en la colonia. Sobresalen el bólido que generó “el tiempo del ruido” en 1687 (Moreno et al., 2016) y la lluvia de meteoritos de Santa Rosa de Viterbo (Moreno, 2010). Salzedo del Villar, historiador de Mompox, describe el paso de un bólido el 18 de mayo de 1781. Esta fecha, sin embargo, tiene algunas coincidencias con las fechas que se han trabajado y es posible que este errada:
En la noche del viernes 18 de mayo de 1781, el mismo día en que era sacrificado bárbaramente Terpac Amaru (Tupac Amaru), por el delito de querer reivindicar sus derechos de inca, fue conmovida la población de la villa de grande alarma, más grande aún pues ya los ánimos se hallaban agitados por las noticias, nunca oídas, ¡de la sublevación a que arriba hemos hecho referencia! A las ocho de la noche un globo luminoso de gran tamaño y color rojo encendido se vio atravesar majestuosa y lentamente el espacio, y fue a perderse en los confines del horizonte sucediendo a su paso, siete u ocho minutos después, espantosa detonación que resonó largo tiempo por todo el ámbito, y ruidos lejanos, acompañados de ligeros estremecimientos de tierra” (Salzedo del Villar, 1987).
El bólido observado en Mompox tiene algunas características de ser un cuerpo rasante (Moreno et al., 2016), es decir, que atravesó la atmósfera terrestre a gran altura y no alcanzó a destruirse totalmente por ablación y continuó posiblemente su camino con una órbita modificada. De esto da prueba el hecho de que el meteoroide fue visto hasta perderse en el horizonte. Según Salcedo una fuerte detonación se escuchó siete u ocho minutos después de la observación del bólido. Esto quiere decir que bólido pasó a una altura superior a los 134 kilómetros área de la atmósfera. Sin embargo, este dato puede ser solo una estimación. Si aceptamos que el bólido pasó por nuestra atmósfera muy alto y que fue muy brillante, es posible proponer que una buena cantidad de material que se desprendió de él y pudo haber generado una gran nube que pudo ocultar el Sol en algunos lugares de nuestro planeta. Esta clase de bólidos son escasos y hay poca información; los más famosos son la procesión de 1860, el bólido del 24 de diciembre de 2014 sobre España y Portugal y el bólido diurno de 1972 observado en los Estados Unidos y Canadá.
A favor de esta hipótesis hay que agregar que la oscuridad en Montería se observó el 19 de marzo a partir de las 10 de la mañana y duró hasta bien entrada la noche. Al día siguiente, el amanecer fue normal, pero a las pocas horas la oscuridad volvió a cubrir la población por periodo no especificado. En Nueva Inglaterra la oscuridad ocurrió a partir de las 10 de la mañana y duro parte de la noche. Esta diferencia tal vez pueda ser explicada con el hecho de que meteoroide entró sobre la costa norte de Colombia y allí se notó más su influencia.
CONCLUSIONES
El oscurecimiento total del Sol en pleno día es un fenómeno que se ha presentado muchas veces a lo largo de la historia y según lo estudiado anteriormente, puede ser generado por varias situaciones entre las principales están las erupciones volcánicas, en cuyo caso esta oscuridad es meramente local es decir cercana a los volcanes. Si su origen se debe a la desintegración de un meteoroide, el fenómeno puede abarcar mayores áreas de influencia y puede desplazarse por efecto de los vientos.
Los fenómenos del “Dark Day” de Nueva Inglaterra y la oscuridad de Montería están relacionados por su similitud y por la cercanía de las fechas en que ocurrieron. La hipótesis más probable, si estudiamos estos fenómenos en conjunto, es la de la entrada y posterior desintegración de un meteoroide en la atmósfera terrestre, generando una nube de polvo meteórico que inicialmente cubrió la zona de Montería y posteriormente se desplazó por el Caribe oriental pasando por la isla de Grenada, llevada por los vientos alcanzó Nueva Inglaterra.
Durante esta investigación se identificaron otras dos narraciones de oscurecimientos en sitos intermedios entre Nueva Inglaterra y Montería, ellos son en Jamaica y la Isla de Grenada, sin embargo, estas poseen escasa información. Por lo tanto, es necesario buscar otras fuentes que permitan conocer mejor como se desplazó la nube entre marzo y mayo de 1780, especialmente sobre el norte de Colombia y el mar Caribe. Los fenómenos observados en Nueva Inglaterra y Montería llaman la atención por su singularidad y coincidencia en sus descripciones y fechas, Y si a esto le agregamos la fecha del paso del bólido de Mompox, es también muy cercana, tenemos en general un problema que puede ser resuelto encontrando nuevas fuentes y estudios geológicos en los sitios que ayuden a descubrir el origen de las sustancias que llevaron al oscurecimiento del Sol en pleno día. Sin embargo, el estudio de estos fenómenos hasta ahora comienza y es necesario encontrar nuevas evidencias que ayuden a confirmar o mejorar las hipótesis que se han presentado en este trabajo.

LISTA DE REFERENCIAS
Angell I. (1899).Diary of Colonel Israel Angell: commanding the Second Rhode Island continental regiment during the American revolution, 1778-1781. Transcribed from the original manuscript by Edward Field and Norman Desmarais. Providence, R. I.: Preston and Rounds Company.
Bailey, M, Markham, D., Massai, S. and Scriven J. (1995). The 1930 August 13 ‘Brazilian Tunguska’ Event. Journal of International Meteor Organization. October 1995, vol115, pp 251-253.
Bortle, J., (1998). The bright-comet chronicles. International Comet Quaterly. Tomado de http://www.icq.eps.harvard.edu/bortle.html.
Bright Side (2022). The Mysterious Dark Day of 1938 – No Sun, No Radio Signals. Tomado de https://www.youtube.com/watch?v=FHxTRsL6imU&t=301s&ab_channel=BRIGHTSIDE
Chatfield, C. (2010). The comet of 1861.The Gallery of Natural Phenomena. The earth, the sea, the sky – and beyond. Tomado de http://www.phenomena.org.uk/comets/comets/comet1861.html
Exbrayat, J. (1971). Historia de Montería. Imprenta Departamental de Córdoba, pp149.
Harris G. (2020). The Dark Day, May 19, 1780. Historic Ipswich. Tomado de https://historicipswich.org/2020/05/15/the-dark-day-1780/
Campanella, T. (2007). Mark Well the Gloom: Shedding Light on the Great Dark Day of 1780. Environmental History, vol. 12, No. 1 (Jan., 2007), pp. 35-58.
Devens, R.M. (1878). The Wonderful Dark Day.1780. Our First Century. Great and Memorable Events. C. A. Nichols & Co., Springfield, Mass. Hugh Heron, Chicago, Ill. 1878, pp 88-96.
Fort, C. (1994). The Book of the Damned. Cosimo Inc. New York pp 276.
Hall, M. (1917). Monthly Weather Review. Volume 45. United States Department of Agriculture. January 1917, pp 366.
McMurry et al. (2007). Fire scars reveal source of New England’s 1780 Dark Day. International Journal of Wildland Fire, 2007; 16 (3): 266.
Moreno, A., Madiedo, J., Zamorano, J., Goncalves, R., Espartero, F., Trigo, J., Ortiz, J., Lacruz, J., Aceituno, E., de Guindos, E., Izquierdo J., Alonso, J., Sánchez de Miguel, A., Ocaña, F. and E. Blanch, E. (2016). Preliminary spectroscopic and dynamical analysis of an Earth-grazer fireball observed on december 24, 2014. 47th Lunar and Planetary Science Conference (2016).
Moreno, F., Barrera, S., Zitzmann, W. y Silva, J.M. (2016). Los meteoritos en la obra de Gregorio Vásquez de Arce y Ceballos. Revista El Astrolabio. Gimnasio Campestre.
Moreno F. (2010). Los meteoritos de Santa Rosa de Viterbo. Revista El Astrolabio. Vol 9 Gimnasio Campestre.
NASA (2021). P/Shoemaker-Levy 9. Solar System Exploration. Tomado de: https://solarsystem.nasa.gov/asteroids-comets-and-meteors/comets/p-shoemaker-levy-9/in-depth/.
Nteve (2011). Buenos Aires se hizo de noche en pleno mediodía. Tomado de https://www.youtube.com/watch?v=zXhif2QXsYs&ab_channel=NtevePer%C3%BA
Noll, K., McGrath, M., Trafton, L., Atreya, S., Caldwell, J., Weaver, H., Yelle, R., Barnet, C., Edgington, S (1995). “HST Spectroscopic Observations of Jupiter Following the Impact of Comet Shoemaker–Levy 9”. Science. 267 (5202): 1307–1313.
Plummer, F. (1912). Forest fires: their causes, extent and effects. With a summary of recorded destruction and losses. United States Department of Agriculture. Forest Services Bulletin No 117.
Roche, E. (1866). Les offuscatuions du soleil et les meteores. Academie de sciences et lettres de Montpellier. Tome sexieme.
Salzedo Del Villar, P. (1987). Apuntaciones Historiales de Mompox. Gobernación del Departamento de Bolívar. Cartagena, pag. 73.
Sears D. (1978). The nature and origin of meteorites. Monographs on Astronomical Subjects: 5. AdamHilger Ltd. Bristol: 24 – 37
Shea. J. (1864). The Historical Magazine, and Notes and Queries, Concerning the Antiquities, History and Biography of America, Vol. 8, pag 61.
Sigurdsson, H., Houghton, B., Rymer, H., Stix, J., McNutt S. (1999). Encyclopedia of Volcanoes. Academic Press.
Tenney, S. (1792). Dr. Tenney’s letter on the dark day, May 19, 1780. Collections of the Massachusetts Historical Society for the year 1792. Boston, volume 1, pp 95-98.
Viator. (1785). New England’s dark day a witness account. Continental Journal del 25 de mayo de 1780.
Williams, S. (1785). An Account of a very uncommon Darkness in the States of New-
Inglaterra, 19 de mayo de 1780. Memorias de la Academia Estadounidense de las Artes y las Ciencias, 1783, vol. 1 (Boston: Adams y Nourse, 1785), 235
Zurcher and Margollé. (1870). Meteors and Atmospheric Phenomena. N. Y.